Todo el que se ha enfrentado al camino del emprendimiento es consciente de que no es un trabajo fácil y los tropiezos, como en todo, se dan. Esto es aún más difícil en el presente año, 2020, cuando las economías de todos los países se han visto notablemente afectadas por la pandemia del coronavirus que ha afectado a los ciudadanos en distintos aspectos de su vida.
Esta situación obliga a que los emprendedores tomen más fuerza y responsabilidad para decidirse hacia dónde encaminar su negocio. Estas son algunas ideas:
- El comercio electrónico: El distanciamiento social está generando alta demanda de compras en línea, hasta para la compra de alimentos y medicamentos.
- Clases online: Los webinars y las clases online ya eran unas actividades en auge en los últimos años. Sin embargo, la situación actual hace que las clases virtuales sean las únicas disponibles por un tiempo indefinido. Para muchos profesores de clases particulares la coyuntura es incluso una oportunidad para continuar, pero en formato digital. A la larga, puede resultar un negocio bastante rentable y práctico.
- Diseño y confección de Mascarillas: Las mascarillas con una necesidad y lo seguirán siendo por tiempo, hasta ahora, indefinido. Es así que posiblemente haya un mercado para poder vender un accesorio de salud que también tenga un diseño de moda.
- Ocio a domicilio: Las personas no salen de casa, pero los eventos, aún así, no se detienen. Puede que muchas personas prefieran organizar eventos en casa al ver imposibilitado salir a discotecas, bares y restaurantes. Algunas ideas a considerar pueden ser: entrega de bebida y comida a domicilio, catering, o cualquier otro tipo de servicio a domicilio.
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