Aprende sobre asertividad y como aprovecharla en la comunicación de tu emprendimiento

Todo emprendedor debería tener la capacidad se ser asertivo. La asertividad, al ser una herramienta que se encuentra entre la pasividad y la agresividad, favorece que las personas comuniquen lo que sienten sin necesidad de pasar por encima de nadie, con una actitud madura y certera. En el ámbito empresarial ser asertivo facilita las relaciones comerciales y el éxito de los proyectos que los emprendedores ponen en marcha. 

Para profundizar aún más en este último tema, ser asertivo en el ámbito del emprendimiento empresarial ayuda a responder sabiamente a los ataques que se puedan recibir en el proceso de desarrollo y crecimiento. Pero, no solo eso. También, esta cualidad permite mantener la tranquilidad en reuniones con la prensa o potenciales inversores. 

De lo expuesto anteriormente se entiende que la asertividad no se adquiere de manera inherente sino que requiere que sea cultivada con paciencia y fuerza de voluntad. 

Las personas que son tímidas suelen no ser muy asertivas pues temen decir lo que piensan y comunicarse con los demás. Además, les asusta hacer valer su forma de pensar, sobre todo ante cualquiera por miedo al rechazo. Si bien dejar la timidez no toma un par de días, es posible empezar a hacer pequeñas acciones desde saludar, si antes no lo hacíamos, hablar más dentro de un grupo de amigos o salir de la zona de confort para sembrar una asertividad más arraigada. 

El ser asertivo implica un estado mental, una predisposición interna a hacer algo y es por eso que puede decirse que empieza por dentro. 

Cabe destacar que uno de los antecedentes por los que las personas no son asertivas es una infancia traumática. Cuando a un niño lo han callado, lo han tratado mal o no han respetado sus ideas, es posible que crezca creyendo que lo que diga es susceptible a ser rechazado o hasta ser humillado. Es por ello que es importante transmitir mucha seguridad y amor desde la niñez. Esto también contribuirá a que la persona crezca siendo mucho menos tímida. 

Una de las ventajas más grandes que tenemos como seres humanos es que tenemos poder sobre lo que nos sucede por lo que, es posible cambiar nuestra situación sobre la marcha, adquirir nuevos hábitos y mejorar ciertos aspectos para ser cada vez mejores.