Día del ingenio y la constancia o, mejor dicho, Día del Vendedor Peruano

El vendedor es una fuerza fundamental en una organización. De hecho, cerca del 10% de esta fuerza recae sobre él. Su ingeniero, facilidad de palabra, perseverancia y personalidad son grandes características que posee de naturaleza o que ha ido construyendo parar desempeñarse con éxito y admiración. Todo esto y más que se desarrollará a continuación hacen que el 29 de abril sea merecedor de un día dedicado a homenajear a esta figura importante en toda organización. 

Pero, ¿cómo nació este día? El Día del Vendedor peruano se originó en 1977 cuando el Mercado Central del Centro de Lima era más visitado por las personas en las afueras que en su interior. Por esto, el alcalde de ese momento, Alberto Andrade Carmona, desalojó a todos los ambulantes y reordenó el comercio en la zona lo cual trajo efectos positivos para todos los vendedores. A raíz de los resultados, lo que hizo Andrade Carmona fue imitado en otros distritos de la ciudad y también otras provincias del país. 

No obstante, esto que hizo el alcalde no eliminó el oficio de vendedor, al contrario, lo reinventó. Por esto, la búsqueda constante de la “ocasión” para sacar adelante el negocio. De esta forma, este día y con el pasar de los años se comenzó a celebrar el Día del Vendedor en Perú cada 29 de abril, para resaltar su labor, pero también para recordar que el oficio de vender es considerado en nuestro país como una ocupación digna. 

Al día de hoy, en Perú existen diversos tipos de vendedores. Primero están los “vendedores ocasiones e informales”, quienes venden productos (manualidades, flores, llaveros, tarjetas, globos, vinchas, polos, demás) según la ocasión o temporada de manera ambulatoria. Aquí también están los canillitas o vendedores de golosinas que recorren la ciudad. También están los vendedores formales, quienes son la imagen representativa del servicio que ofrece una microempresa, así como pequeños y medianos negocios, empresa o corporación a sus clientes. Aunque, ambos vendedores tienen algo en común: el reto diario de convencer a alguien de que lo que ofrece le ayudará a solucionar un problema. Finalmente, para quienes buscan emprender e insertar su producto o servicio en el mercado pueden seguir los siguientes consejos: 

1. Selecciona tu área de actuación: especialízate en un área y conoce a fondo las necesidades de las personas para ofrecerles siempre la mejor solución. 
   
   
2. Conoce tu producto: para que puedas transmitir toda la información al respecto. Conoce sus atributos y ventajas para estar preparado y serio para tu red de clientes. 
   
   
3. Hazte presente en los lugares adecuados: esto te aportará buenos resultados. Crea perfiles atractivos y mantenlos actualizados con contenidos valiosos.